Un 85 por ciento de los ciudadanos de la UE pide una mayor acción de las autoridades políticas en contra de la difusión de desinformación a través de la red, según un estudio de la Fundación Bertelsmann publicado este jueves.

Un 89 por ciento pide a su vez un mayor compromiso en contra de la desinformación por parte de los responsables de plataformas de internet.

Según un comunicado de la fundación alemana el deseo de una mayor acción en contra de la desinformación va acompañado de una gran inseguridad acerca de la veracidad de las informaciones que se difunden a través de internet.

Un 54 por ciento de los encuestados dice que con frecuencia tiene dudas acerca de la veracidad de los contenidos de internet. Un 39 por ciento ha detectado casos concretos de desinformación.

«Las informaciones fiables son el fundamento para formar una opinión y por lo tanto el fundamento de la discusión democrática», dijo el director del estudio, Kai Unzicker.

«En Europa la gente tiene una gran inseguridad acerca de qué contenidos digitales son de fiar y cuáles son manipulados deliberadamente. Quien quiera fortalecer la democracia no puede dejar a los ciudadanos y ciudadanas solos en la lucha contra la desinformación», agregó.

El comunicado señala que los datos dejan claro que se necesita una acción ya que menos de la mitad de las personas interrogadas -un 44 por ciento- han contrastado las informaciones que reciben por internet y sólo un 22 por ciento han reportado informaciones falsas detectadas o han advertido a otros de ellas.

Entre los jóvenes con buena formación es mayor la disposición a contrastar informaciones pero Unzicker advierte que «la capacidad de reconocer y reportar falsas informaciones no puede depender de la edad ni del grado de formación».

El estudio muestra también que cuantos más canales usen las personas más posibilidad tienen de detectar informaciones falsas.

Especialmente los usuarios de Twitter y Telegram registran con cierta frecuencia informaciones falsas y las reportan.

Con respecto a las repercusiones de las redes sobre la democracia hay posturas dividas. Un 30 por ciento ve ante todo desventajas y un 28 por ciento cree que predominan las ventajas mientras que un 42 por ciento ve tanto ventajas como desventajas.

El estudio recomienda para Alemania y Europa un monitoreo sistemático por parte de científicos independientes y actores de la sociedad civil para detectar mejor desinformaciones y señalarlas como tales.